La versión recorre los pasillos del Congreso nacional y no son pocos los «camporistas» que se encargan de alimentarlas. Les resulta funcional para Córdoba. En la «política» son bien conocidos los vínculos entre Sergio Massa y buena parte del elenco del gobierno de Javier Milei. Es más, es un dato irrefutable que el ahora presidente se incorporó, antes de serlo, al equipo de economistas que le aportaban «papers» a Massa en tiempos de Alberto Fernández. La relación más encumbrado es la del hombre de Tigre con el Jefe de Gabinete Guillermo Francos. Sin embargo nadie puede confirmar que sea esa la via de contacto, pero si que buena parte de los fondos de financimiento para la campaña de Natalia De la Sota provendrían del mismísimo presidente trumpista Javier Milei. La apuesta del libertario es que De la Sota le reste votos a Juan Schiaretti y que de ese modo se compensen la pérdida de buena parte del electorado irracional libertario que estan señalando las encuestas. El propósito de De la Sota parece orientado a capitalizar fuerza propia para negociar dentro del peronismo de Córdoba con miras a 2027. Esa es la única explicación posible después que sus «negociadores» con el gobierno provincial, en la previa del armado de listas, rechazaran la oferta de Schiaretti para que ocupara el segundo lugar en la lista.
Con todo, lo real es que fondos a Las Fuerzas del Cielo y a Karina no le faltan. Si se gastaron 300 mil dólares en el show delirante-kisch del Movistar Arena, bien pueden destinar recursos a raspar al peronismo schiarettista en Córdoba. El 3% alcanza para todo.