El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a expresar declaraciones contundentes sobre la difícil situación económica y social del país, afirmando que Argentina «está muriendo». Estas palabras, que generaron un fuerte impacto político y económico en ambos países, fueron pronunciadas a bordo del avión presidencial Air Force One.
En una entrevista, Trump justificó la posible ayuda de su gobierno a Argentina, que incluiría la reanudación de compras de carne vacuna, señalando la buena relación que mantiene con el presidente argentino y describiendo la situación del país como una lucha por su supervivencia. «Argentina está luchando por su vida. No tienen dinero, no tienen nada, están luchando muy duro para sobrevivir», indicó, añadiendo que si puede ayudarlos en un «mundo libre», eso sería positivo.
Las declaraciones del mandatario estadounidense reflejan un reconocimiento de la gravedad de la crisis argentina, y también ponen en evidencia la importancia que tiene para Washington involucrarse en la región en momentos de vulnerabilidad económica.